Quetschentaart, tarta de ciruelas de Luxemburgo. Reto Reposteras por Europa


Aquí me tenéis un mes más puntual a mi cita con el Reto Reposteras por Europa que organiza Isabel, del blog Gotas de Azúcar y Vainilla. Este mes el honor de escoger destino ha recaído en mí y he optado por que viajemos hasta Luxemburgo. La razón de mi elección ha sido simple: de los países europeos que nos quedan por visitar en este reto, es el único en el que he estado.

He de reconocer que, a pesar de haber estado en Luxemburgo, no tengo especial recuerdo de su gastronomía. No me lo tengáis en cuenta: estuve muy poquito tiempo (hice una ruta de una semana por Holanda, Luxemburgo, Bélgica y Francia) y además, era joven y mi economía no daba para mucho... Por eso este mes me ha vuelto a tocar investigar un poco para escoger receta, aunque no demasiado porque en cuanto descubrí esta tarta tuve claro qué receta escoger. Se trata de una Quetschentaart, una tarta de ciruelas qe queda muy rica y es muy sencilla de hacer. Además estamos en plena temporada de ciruelas, así que no había excusa. Os digo los ingredientes que vamos a necesitar y nos ponemos a cocinar.


  • 250 gramos de harina
  • Un huevo
  • 100 gramos de mantequilla en pomada
  • 50 gramos de azúcar
  • Media cucharadita de levadura en polvo
  • Una pizquita de sal
  • 5 o 6 ciruelas
  • Un puñadito de almendra laminada
  • Azúcar perlado (opcional)


Vamos a comenzar haciendo la masa para nuestra tarta. Ponemos en un bol la harina, la levadura, la sal y el azúcar y añadimos la mantequilla blandita y el huevo. Mezclamos todo (yo lo he hecho directamente con la mano) hasta que los ingredientes se integren y tenga,os una masa lisa y manejable. Puede ser que, en función del tipo de harina o del tamaña del huevo necesitemos añadir un poco más de liquído, como me ha pasado a mí. En ese caso, basta añadir una cucharada de agua fría.

Cuando la masa esté lista, hacemos una bola, la envolvemos en papel film y la guardamos en la nevera media horita. Mientras tanto, vamos a preparar el relleno. Lavamos las ciruelas, las partimos por la mitad. les quitamos el hueso y las cortamos en gajos (yo he sacado 8 gajos por cada ciruela).

Una vez la masa haya reposado, la extendemos con ayuda de un rodillo hasta dejarla de más o menos 5 centímetros de grosor. Cubrimos nuestro molde con la masa, cortamos el sobrante y distribuímos por encima las ciruelas previamente cortadas. Por último, echamos el puñadito de almendras laminadas.

Metemos nuesta tarta en el horno (precalentado a 200 grados con calor arriba y abajo) y horneamos durante 35 o 40 minutos, hasta que veamos que los bordes de la masa están dorados. Sacamos, colocamos el molde sobre una rejilla y dejamos que se enfríe.

Antes de servir, podemos echar un poco de azúcar perlado o de azúcar glass. ¡Listo! ¡Ya podemos zamparnos nuestra quetschentaart!


Algunos consejos:
  • Yo no he necesitado echarle azúcar a la tarta por encima después de hornearla porque las ciruelas que he usado estaban muy dulces, pero si las vuestras son un poco más ácidas ponedle un poco de azúcar glass o miel por encima una vez se enfríe.
  • Esta tarta queda perfecta si la acompañamos con una bola de helado de vainilla.
  • Os recomiendo que no uséis ciruelas excesivamente maduras para que no suelten demasiado zumo durante el horneado.


Esta tarta es muy rica y no puede ser más sencilla, con ingredientes de estar por casa; casi seguro que este verano la repetiré más de una vez. Si os animais a hacerla, mandadme una foto para que pueda ver lo buena que os queda. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y Youtube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!

Comentarios

  1. Y acá llego también para este caso muy puntual ;), pues esta tarta te quedo muy bonita. Esta creo que es de las recetas clásicas y contundentes de Luxemburgo según estuve leyendo. Que delicia el viaje que te diste y aunque fue corto, me parece fabuloso. Esta la dejo pendiente para cuando consiga ciruelas, por estos lugares del planeta.

    un beso y feliz fin de semana

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  2. Hemos pensado igual hasta en el molde jejejejjee
    Yo he quedado encantada con esta tarta, fresquita a pesar de tener que encender el horno para hacerla.
    Besotes

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  3. Parece deliciosa! Con las ciruelas y el toque de las almendras promete.
    Un besito :)

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  4. Parece deliciosa! Con las ciruelas y el toque de las almendras promete.
    Un besito :)

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  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  6. Es genial tu receta y tus fotos!!! Habrá que probarla!!!

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  7. Que delicia de tarta, y sencilla, en cuanto tengan las ciruelas rojas q me gustan en la fruteria la preparo!!! Feliz verano y nos vemos en Islandia

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